Hace unos días reflexionaba acerca del tiempo que ha transcurrido desde que comencé mi vida laboral… ¡más de treinta años! Toda una vida y un camino recorrido que me ha llevado a emprender y a lograr mis sueños después de un emprendimiento fallido y varias experiencias profesionales en distintas empresas.
Seguro te ha pasado por la cabeza cambiar de trabajo o de actividad porque ya no disfrutas del todo lo que haces o porque lo realizas en automático, como si fueras un robot. Tal vez ni siquiera lo has pensado, pero la cosa es que a lo mejor ni siquiera te gusta y solo te mueve la remuneración económica.
Yo tuve esa sensación en algún momento, aunque siempre le he puesto pasión a lo que hago y he buscado dar lo mejor de mí, siempre ha sido enfocada en perseguir mis sueños desde las distintas trincheras profesionales recorridas en cada una de las etapas de mi vida. Y es que los intereses y las ambiciones van cambiando conforme avanzan los años.
De vendedora de materias primas para la industria alimenticia en la empresa de mi familia, periodista, docente, capacitadora y correctora de estilo, a “hacedora” de sueños (editora de libros), así puedo resumir en pocas palabras el transcurrir de mi vida profesional.
En este camino, la búsqueda por alcanzar el emprendimiento que hoy ya es una realidad para mí al verse cristalizado en la editorial Ponle Acento, ha sido una constante y ha tenido un ingrediente en común: compartir, servir a los demás y ayudarlos a cumplir sus sueños.
¿Miedo a emprender y a soltar “mis ingresos seguros”? Sí y mucho, pero estoy convencida de que, si no te arriesgas por alcanzar tus metas con firmeza, determinación, constancia y disciplina, te conformarás siempre por vivir una vida gris, sin emoción, ni pasión.
A continuación, te comparto algunos de los consejos que me han funcionado para emprender con éxito:
- Visualízate haciendo lo que disfrutas. Lo primero que hay que hacer es soñar en grande e imaginar cómo te sentirías si pudieras estar al frente de ese proyecto que tanto anhelas y que, quizá, hasta imaginaste cuando eras niño. Se siente bien de tan solo pensarlo, ¿no crees?
- Confía en ti. Mucha gente te aconsejará no dejar tu “trabajo seguro”, en el que cada semana, quincena o mes recibes un ingreso fijo por los servicios que prestas; quizá, hasta te tildarán de loco por dejarlo para dedicarte al cien por ciento a lo que amas y te hace feliz. Escucha consejos y piensa en los pros y los contras. Recuerda que las personas exitosas toman riesgos y que todo requiere un esfuerzo.
- Busca trabajar por proyectos. Emprender no significa que “avientes” todo para empezar de cero. Te recomiendo que busques trabajar de la mano con algunas empresas o personas mediante el esquema de proyectos, de tal forma que puedas recibir cada periodo una iguala que te permita hacer frente a los primeros meses en los que te adaptarás a tu nuevo esquema de trabajo.
- Haz alianzas con personas afines a tu proyecto. Lo mejor que puedes hacer es rodearte de un equipo de trabajo que te ayudará a fortalecer tu emprendimiento, ya que cada uno pondrá su granito de arena para darle profesionalismo y hacer realidad tu empresa de manera integral.
- Crea un fondo de respaldo. Es importante que sepas que al comprometerte plenamente a tu proyecto profesional, habrá meses de bonanza, pero también habrá momentos difíciles en los que los ingresos serán menores. Antes de comenzar de lleno con Ponle Acento, generé un ahorro que me diera seguridad en los primeros tres meses de mi nueva vida como empresaria. Te aseguro que si lo haces, te sentirás confiado y con toda la energía para hacer algo en grande.
Espero que la experiencia que te he compartido en estas líneas te sea útil y te inspire a dar lo mejor de ti… vida solo hay una, ¿qué esperas para ponerle acento?